A las madres en su día
A las madres en su día
Por Abraham Cutipa Galindo
En
este día especial deseo recordar con mucho cariño a nuestra madre espiritual, la
Virgen María, quien dio vida a nuestro Señor Jesucristo. Asimismo, a mi esposa
Sarita, quien en su rol de madre asume un rol protagónico en la educación de
isabelita, con paciencia, delicadeza y amor; y como esposa es una mujer noble,
comprensiva y cariñosa. A mi madrecita Libia a quien la tengo presente día a
día en mis oraciones a pesar de la distancia y quien se esforzó mucho por dar
lo mejor para mí y mis hermanos.
Mamá
Libia, seguimos distantes por las circunstancias, sin embargo, cada vez que nos
comunicamos por teléfono me alegra mucho escucharte. Cuanto extraño tus abrazos
y tus riquísimas comidas. Eres un regalo de Dios, una madre ejemplar, luchadora
y trabajadora. Quiero que sepas que siempre estás en mi corazón y en mi mente a
pesar de que no podamos vernos físicamente. Después de la cuarentena seguro que
mis hermanos te podrán visitar y abrazarte.
A
mi suegra Margarita, a mis hermanas, tías, primas, sobrinas, comadres, cuñadas,
amigas y a las madres que decidieron irse del país por una mejor oportunidad, a
las madres del Perú y del mundo les deseo con mucho cariño que la Santísima
Trinidad las bendiga siempre.
También,
deseo rendir un homenaje póstumo a mi abuelita Isabel, a quien la recuerdo con
mucho cariño y con mucho amor. De niño te visitamos con mi Mamá, mis tías y
tíos, tu, nos atendías con esmero, cocinabas para todos en tus ollas de barro y
cuando nos íbamos a la chacra preparaban la riquísima Huatia (Papa, Choclo,
carne y entre otros). Tiempos bellos y cargados de amor. Asimismo, rindo
homenaje a todas las madres que ya partieron a la casa de nuestro Padre
celestial.
Estamos
de pasada en esta vida, más aún con este virus (Covid-19) que nos ha cambiado
la vida por completo porque ya no podemos acercarnos a quien más amamos. Sin
embargo, por la seguridad de nuestros padres es mejor así, estar distantes, por
ahora; ya llegarán tiempos para abrazarlas y darles el cariño que merecen, sin embargo,
con una llamada diaria o interdiaria, ellas serán felices.
¡Feliz
día de la Madre!
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