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“El tumor es más dominable y menos trágico’’

‘’El tumor es más dominable y menos trágico’’, así lo señaló su eminencia, Cardenal Angelo Scola quién el último jueves en visita al Istituto Nazionale dei Tumore se reunió con pacientes, familiares y personal de la sanidad con el propósito de llevar aliento y esperanza a las personas que sufren esta enfermedad. Asimismo enfocó temas cómo la cura palleativa, la esperanza, la sacralidad humana y la enfermedad del tumor.

El arcivescovo de Milano, resaltó que la enfermedad del Tumor es más dominable y menos trágica gracias a estructuras cómo el Instituto del Tumor dónde la cura, la terapía junto a la relación personal representan una vía práctica para que viva el hombre sin renunciar a sus fundamentos y principios.

“Convivir con la enfermedad y no dejarse dominar por el síntoma” así, expresó su eminencia afirmandó que la persona encuentra el volto mas grande y digno para quién espera en la vida eterna. También resaltó que Jesús documentó estando presente un voto practicábile del cual el amor es la experiencia más grande. “...como la madre que tiene en brazo a la niña con la enfermedad, es allí dónde se ve que el amor vence”.

Respecto a la Cura Palleativa, el Dr. Augusto Caraceni, Director de “Cure Palliative, Terapia del dolore, Riabilitazione” afirmó que en este terreno están cerca al enfermo y a los que se encuentran en fase terminal se confronta cotidianamente y se agrega el aspecto social, psicológico y espiritual; en ese mismo sentido destacó que existen personas que desconocen esta temática y muchos por asuntos ideológicos. Bajo esta premisa el Cardenal Scola indicó que la Cura Palleativa, va afrontada cómo primordial porque el drama de la muerte queda, pero como Jesús lo exterminó, resta en la persona hacer el cambio trágico y doloroso de la muerte, por ello, afirma, “..en el pasaje al Padre se crea un cambio muy precioso porque en esta nueva fase, es decir, salvar hasta el último momento el dono de la vida.

El Cardenal Scola agregó que la ciencia médica produce tentación de delirio en sociedades como Estados Unidos y Japón dónde muchos invierten millones de dólares para tentar la inmortalidad del hombre.”Biólogos afirman que la vida del hombre sería hasta los 120 años, yo, creo que ustedes que están al contacto directo del dolor, sufrimiento de los pacientes pueden constatar que la medicina no genera la felicidad, no tengo una receta en mano pero debo decir que debemos buscar la luz en la fé a Dios. El hombre debe encontra el senso de la vida cómo esperanza concreta, con la fuerza de comenzar cada mañana” declaró.

En la intervención de un paciente se unen aspectos cómo la Investigación, competencia, actitud humana, apertura a la esperanza y la sacralidad de la vida, señala su eminencia, afirmando que, “nosotros somos personas un poco singulares porque hoy estamos en un lugar así particular creativo, ayer no estabamos y mañana no estaremos. Nunca en ningun tiempo, en ningún momento el hombre podrá autogenerarse, es por eso que tantas religiones hablan de la sacralidad de la vida”.

Testimonios

Según,Rocco Federico Cocchia, presidente de la "Associazione Donatori di Sangue" declaró que cada vez hay más egoísmo y personalidad en la sociedad por reclutar más donadores de sangre. Asimismo, una paciente que ingresó en 1968 a la extrucutra sanitaria expresó que la atención es excelente y que lo tiene en el corazón.

Antonela, una paciente de la Toscana recalcó que por segunda vez se está recuperando en el Instituto y afirmó que encontró una atención espiritual en el sacerdote desde el primer intervento hasta llegar a casa. Por otro lado, el paciente R.C. indicó que está en cura por un año y medio y que el Instituto le sirve para acercarse a muchas personas y amigos y experimentó que la enfermedad no es una cosa contra su persona muy al contrario considera una oportunidad para conocer mejor la realidad y desarrollar mejor su vida.

Su eminencia, destacó que el hombre genera un test de sensibilidad humana de una ciudad, de un pueblo o de una Nacion, “una realidad como la de ustedes, escucharlos y conocer sus experiencias que se hicieron curar en este Instituto y a punto un lugar de excelencia, es propio un factor de grande humanidad de nuestra ciudad de Milano”, así culminó su discurso.